Sexualidad posparto
El nacimiento de un bebé trae consigo muchas alegrías y emociones. Tras el parto, la mujer suele enfrentarse a diversos cambios biológicos, hormonales y sociales que afectan directamente su salud y bienestar sexual.
La lactancia materna es el momento del vínculo maternal. La hormona del abrazo, u oxitocina, está en su punto máximo. Sin embargo, con este cambio hormonal que ayuda a nutrir al recién nacido, la mujer puede sufrir sequedad vaginal severa y relaciones sexuales dolorosas. Su libido, interés o deseo sexual pueden estar en su punto más bajo. Los cambios hormonales también pueden contribuir a cambios de humor y a sentirse decaído o deprimido.
Aquí le presentamos algunos consejos útiles para navegar el cuarto trimestre o período posparto.
Escucha a tu cuerpo
La fatiga, la falta de sueño y el estrés a veces pueden resultar abrumadores. Descansa cuando tu bebé descanse. Busca la ayuda de tu red de apoyo. Asegúrate de no descuidarte y planifica actividades especiales que te permitan recargar energías y nutrir tu espíritu.
Comunicar
La intimidad y la sexualidad pueden cambiar a medida que crece la familia. La conexión sexual no tiene por qué limitarse a las relaciones sexuales. Hay otras maneras de mantener una conexión íntima. Sigan planeando citas y escapadas especiales para adultos. Sean creativos y usen su imaginación.
Lubricar
Si sufres de sequedad vaginal o experimentas dolor durante las relaciones sexuales, considera usar un lubricante de venta libre. Si bien tanto los productos a base de agua como de silicona pueden ser útiles, muchas mujeres prefieren la durabilidad de un producto de silicona, ya que el tiempo hasta la excitación o el orgasmo puede prolongarse en el posparto.
Obtener ayuda
Aunque muchos problemas de salud sexual se resuelven, algunos pueden persistir. No dude en buscar ayuda profesional y hacerse un chequeo médico. No es señal de debilidad. Hay muchos profesionales de la salud especializados en la evaluación y el tratamiento de dificultades sexuales. No dude en hablar con su obstetra o ginecólogo.
Autor: Dr. Michael Krychman
Fuente original: https://www.uberlube.com